Editor Freddy Medrano
BUENOS AIRES, Argentina (Tomado de AP) — Diego Maradona, padre de la leyenda argentina del fútbol del mismo nombre, falleció el jueves a los 87 años debido a problemas cardiacos y respiratorios.
El propio ex futbolista confirmó la noticia en un mensaje grabado difundido por el canal C5N: “Gracias a los doctores que hicieron todo por dejarlo vivo, pero se fue en paz y con todo el amor de todos nosotros, estuvimos todos los hijos”.
Don Diego o “Chitoro”, como era apodado, falleció en la clínica Los Arcos de Buenos Aires en momentos en que su hijo, sus nietas Dalma y Gianinna y su ex nuera Claudia Villafañe se encontraban en el centro médico, adónde habían acudido en horas tempranas del día alertados por el empeoramiento en la condición del enfermo.
“Gracias también al periodismo, que respetó en todo momento el problema que era entrar y salir de la clínica y a todos los argentinos por rezar por mi papá”, concluyó el ex capitán de la selección argentina y campeón mundial en 1986.
El anciano había sido hospitalizado a principios de junio debido a sus severos problemas de salud e inmediatamente entró en un estado de coma inducido. En el último año, Don Diego sufrió varias internaciones por dolencias urinarias y cardiacas.
“Chitoro” era oriundo del poblado de Esquina, en la provincia de Corrientes, unos 700 kilómetros al noreste de Buenos Aires. A los 13 años conoció a quien sería la madre del futbolista, Dalma Salvadora Franco, más conocida como “Doña Tota”. Se casaron siete años después.
Tuvieron ocho hijos: Ana, Rita, María Rosa, Liliana, Diego, Raúl, Hugo y Claudia.
Maradona, padre, sostenía el modesto hogar transportando frutas y maderas en una pequeña lancha. El dinero escaseaba y ya padre de dos hijas decidió buscar mejor suerte en Villa Fiorito, una barriada humilde al sur de la capital argentina. El hombre consiguió trabajo y se trajo a la familia a una casa modesta con techo de chapa.
El 30 de octubre de 1960 nació Diego Armado, el quinto hijo de los Maradona y el primer varón después de cuatro niñas.
Don Diego, que había sido futbolista amateur en su Corrientes natal, fundó el equipo Estrella Roja, integrado por niños del barrio, entre ellos su hijo Diego, ya prodigio en ese entonces. Al pequeño luego se le presentaría la oportunidad de jugar en los “Cebollitas”, equipo de infantiles de Argentinos Juniors, camiseta con la que debutó a los 16 años.
El resto es historia conocida, pero Diego siempre agradeció los sacrificios que hizo su padre para convertirse en el astro que fue.
El técnico de la selección argentina en el Mundial de 2010 destacó la serenidad que le inspiraba “Don Diego”. “Lo único que quiero es parecerme un poco a mi papá…porque vos lo ves a mi viejo y te despierta una ternura increíble, paz, tranquilidad…Yo lo único que quiero es tener una hora de tranquilidad y una hora de cabeza de mi viejo y ahí si ya me puedo morir tranquilo”, dijo Maradona en una entrevista con el canal TyC Sports.
En entrevistas con la prensa, Don Diego siempre destacaba el orgullo que le producía ser padre de uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol.
“Ser el papá de Diego es un orgullo; salir por ahí y todo el mundo saludarme, hablar conmigo, la gente me dice `lo felicito por el hijo’ y yo no sé qué decir”, dijo en una ocasión a “Fútbol Retro TV”.
La madre del ex jugador de Argentinos Juniors, Boca Juniors, Barcelona y Napoli, entre otros clubes, falleció en noviembre de 2011, a los 81 años.
