Manuel Hernández Villeta
La revolución cubana fue un ejemplo a seguir por los jóvenes de las generaciones de los 60 y 70. Fueron sueños que para muchos no llegaron a cumplirse en el continente, pero que se dieron en Cuba, en base a los principios de igualdad económica, respeto a los derechos humanos, fin de la opresión, control de los capitalistas nativos y extranjeros.
La lucha por un mundo mejor era necesario implementarla en una América Latina que se había convertido en tubo experimental de los Estados Unidos para el neo-colonialismo y en cuna de dictadores. La revolución cubana es una acción que rompe las cadenas de la dependencia, y de igual a igual enfrenta a la gran potencia del Norte.
Pero todo comenzó con una idea que en su etapa primigenia fue condenada al fracaso. El asalto al Cuartel Moncada es el principio de la revolución. Un paso que a pesar de ser tortuoso, sentó las bases de una lucha de independencia nacional.
Fidel Castro con su historia me absolverá abre el camino a seguir, levanta conciencias en esa larga lucha que todavía está pendiente en Latinoamérica para hacer un continente que conozca la igualdad económica, la libertad y el progreso.
Los dominicanos estuvimos cercanos a la revolución cubana desde ese 1953. En ese año, la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo se encontraba en su momento cumbre y desafiaba a todos los gobiernos democráticos de América Latina y en esa burla se convertiría en el refugio de dictadores defenestrados.
Luego del triunfo de la revolución cubana en el 1959, apenas seis meses después, llegan los expedicionarios del Movimiento de Liberación Nacional, por Constanza, Maimón y Estero Hondo, los cuales son exterminados de inmediato por las fuerzas militares trujillistas.
Pero de esa llama encendida surge el movimiento clandestino y revolucionario 14 de junio, al cual le tocó llevar la resistencia contra Trujillo, bajo el liderazgo de Manolo Tavárez Justo. Es ese triunfo de la revolución cubana, que lleva a los Estados Unidos a revisar el mantenimiento de una férrea dictadura en la República Dominicana.
Fidel hizo una revolución gloriosa que ya está en las páginas de oro de la historia latinoamericana. Hoy está en su etapa biológica final, pero sus ideas de redención en el continente de la esperanza siguen presente. Todavía se escucha el grito de redención lanzado por la revolución francesa, y reivindicado por la cubana que pregona que todos los hombres tienen derecho a vivir en libertad, gozando de los beneficios del desarrollo y de la libre independencia individual y colectiva. Reconocimiento a todos los hombres y mujeres que luchan por la libertad.
