Por Humberto Salazar
La verdad es que da un ejemplo inédito el Ministro Administrativo de la Presidencia, José Ramón Peralta, cuando responde de inmediato al periódico Diario Libre, ante datos incorrectos publicados sobre su declaración jurada de bienes, que aumentan a casi el doble lo que realmente es su patrimonio personal y familiar.
Cuando hablamos de que no tiene precedentes una aclaración como la que realizó ayer Peralta, es porque lo que se dice por lo bajo es que los funcionarios públicos hacen todo lo contrario a lo que fue su nota aclaratoria, es decir, inflan los montos de sus bienes al declarar por primera vez con el fin de justificar lo que dicen tener a la salida de la función pública.
Para los que podrían haber tenido dudas, cuando José Ramón Peralta ha advertido en diversas ocasiones del compromiso que tiene el Presidente Danilo Medina con la transparencia en el uso de los fondos públicos, pues ahí tienen una muestra de que el ejemplo entra primero por la casa.
Porque José Ramón durante los poco mas de cuatro años de gobierno de Danilo, ha sido la sombra del presidente y el que da seguimiento a los proyectos que en forma directa ejecuta el gobierno desde la presidencia de la República, es decir, es la persona que no permite que la palabra presidencial caiga en el vacío cuando este hace compromisos directos en sus múltiples viajes por toda la geografía nacional.
Entonces el Ministro Administrativo podría ser calificado como del interior de la casa y confianza del presidente de la República, por lo que da un ejemplo de como debe ser el comportamiento de un funcionario público cuando detalla al centavo, para un periódico de circulación nacional, lo que casi nadie leerá ni por curiosidad.
Esta acción es única, porque primero detalla el equívoco y aclara que sus bienes fueron mal calculados y se le asigna una cuantía que no es la real, por lo que sus cálculos serán hacia una cantidad menor que la publicada, y lo hace sin que nadie haya cuestionado el monto publicado porque todos los que conocen a José Ramón saben que es un exitoso agro-empresario, que incluso fue presidente de la Junta Agroempresarial Dominicana.
Es decir, bien pudo haberse quedado callado, no realizar ninguna aclaración, y es muy poco probable que alguien cuestionara el origen de lo que se le adjudicó en el periódico, que no coincidía con lo que realmente había entregado como su declaración jurada.
Sin embargo, José Ramón asume un camino que ha sido muy difícil de transitar para tanta gente que ha pasado por la administración pública; la transparencia total al alcance de cualquiera que quiera investigarlo y sin que nadie tenga que pedírselo ni exigírselo.
Esta muestra de honradez y apertura, que es lo que exige la ley de declaración jurada de bienes, es una garantía de que a su salida del gobierno, el actual Ministro Administrativo de la Presidencia, estará mas que dispuesto a que se comparen y pidan justificaciones al aumento o disminución de su patrimonio, porque ese es el precio que hay que pagar, la perdida de la privacidad, al asumir un cargo público.
El que quiera hacer un ejercicio contable de los bienes materiales que tiene José Ramón Peralta, solo tiene que ir a la pagina que publica el periódico Diario Libre del día de ayer, para que lea y revise lo que es tener sus cuentas muy claras y precisas.
En un país con tanta gente curiosa y que cuestiona todo, asumimos el elogio a una persona, que a pesar de las responsabilidades públicas que actualmente ostenta, conoce perfectamente que cumplir con la ley es el mejor ejemplo que puede dar a sus compañeros en el gobierno.
Después de todo, si lo hizo el Ministro Administrativo de la Presidencia, un funcionario que tiene su oficina a cuatro puertas del despacho presidencial, no sabemos como alguien de menor rango podría justificar no declarar la verdad al firmar su declaración jurada, cuando sabe que es potestad de cualquier ciudadano el cuestionarlo e inquirirlo.
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