El portavoz militar de la coalición antiyihadista liderada por Washington, el coronel Ryan Dillon, informó este jueves que aviones de la coalición liderada por Estados Unidos atacarron un convoy prorrégimen en Siria cerca de la frontera con Jordania.
“La coalición ha bombardeado a las fuerzas prorrégimen (…) que suponían una amenaza para las fuerzas estadounidenses y las fuerzas aliadas (sirias) en At-Tanf” expresó Dillon.
Este hecho aconteció un mes después de la primera acción militar directa de Estados Unidos contra el Ejército de El Asad al lanzar decenas de misiles contra una base aérea en respuesta al uso de armas químicas contra civiles por parte del régimen, además coincide con las negociaciones que se están celebrando en Ginebra desde el pasado martes, auspiciadas por la ONU, entre representantes del régimen y la oposición, que aceptaron formar un comité de expertos sobre la Constitución.
Otro responsable estadounidense, que pidió el anonimato, precisó a la AFP que las fuerzas prorrégimen atacadas eran “probablemente milicias chiitas”, sin dar más detalles sobre su identidad.
El secretario estadounidense de Defensa, Jim Mattis, aseguró que Estados Unidos no trataba de “incrementar su papel” en la guerra civil sino de defender a sus tropas si se ven amenazadas.
