WASHINGTON – Al menos 25 demócratas han firmado una iniciativa de ley que podría destituir al presidente Donald Trump, apelando a la Enmienda 25.
La justificación del proyecto, conocido como HR1987, lanzado por el representante Jamie Raskin, es que la “incapacidad” del mandatario ha ido demasiado lejos como para continuar liderando el mundo libre.
La aplicación de la Enmienda 25 permitiría que el vicepresidente Mike Pence asumiera el poder en caso de muerte o remoción del mandatario en funciones, en este caso el presidente Trump.
El proyecto está sustentado en la Sección 4 de la Enmienda 25, integrada a la Constitutución en 1967, informaron The Washington Post, CNN, MSNBC y Fox News.
“Cuando el vicepresidente y la mayoría de las principales oficinas del Ejecutivo o de cualquier otro órgano del Congreso pueda por ley proveer, transmita al Presidente ‘pro tempore’ del Senado y del Portavoz de la Cámara de Representantes su declaración escrita de que el presidente no puede desempeñar los poderes y deberes de su cargo, entonces el vicepresidente asumirá inmediatamente los poderes y deberes del cargo como presidente interino”, indica la primera parte de la Sección referida.
Ese sería un primer paso, ya que una vez echa la solicitud, en los siguientes 21 días, ambas Cámaras deberán someterlo a votación y obtener dos tercios de los votos en cada una, para determinar si el vicepresidente continúa en el cargo o el mandatario electo reanuda sus labores.
Raskin dijo que está preocupado porque “algo está seriamente mal con Trump”, a quien señala de un cuestionable patrón de conducta y sus erráticos comentarios en Twitter.
“No se siente realmente como que el barco está yendo en la ruta correcta ahora”, consideró.
Al crearse una comisión especial, el Portavoz de la Cámara, el republicano Paul Ryan; la lideresa de la minoría demócrata, Nancy Pelosi; el líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnel, y el de la minoría demócrata Charles Schummer, deberán elegir un médico y un psiquiatra para que determine si el presidente Trump continúa o no como presidente.
El plan parece viable, pero el primer obstáculo al que se enfrenta es que el vicepresidente Pence le dé la espalda al presidente Trump; sin embargo, el tema está sobre la mesa.
Desde finales de junio, el tema se ha comentado en redes sociales, donde los demócratas justifican su soporte a la propuesta.
“Los tuits de Trump impulsan la violencia contra los medios. NO ES UNA BROMA. Él debe de tener mayores estándares y debe renunciar”, escribió Sheila Jackson Lee.
