Sitges, España.- “Jupiter’s moon”, una parábola sobre la situación de los refugiados en Europa, se llevó este sábado el premio a la mejor película en la 50 edición del festival de cine fantástico de Sitges, en la que la producción latinoamericana irrumpió con fuerza con premios para la brasileña “As boas maneiras” y la comedia negra argentina ‘Madraza’.
La cinta del húngaro Kornél Mundruczó explora la relación entre un médico, en plena crisis personal y profesional, y un refugiado sirio que tiene la capacidad de levitar. Con tintes metafísicos, la película es una dura crítica a la corrupción que rodea la acogida de los refugiados en Hungría y en toda Europa, servida por buenos actores y unos efectos especiales que fueron reconocidos también con un premio.
“Los géneros puros quizás son un poco vacíos, me gustan más los géneros híbridos, que reflejan mejor la sociedad”, dijo Mundruczó, que explicó que el proyecto surgió a raíz del impacto que le provocó una visita a un campo de refugiados.
Otro de los protagonistas del certamen fue el cine brasileño, con ‘As boas maneiras’, de Juliana Rojas y Marco Dutra, premio de la crítica y mención especial para su protagonista, Isabél Zuaa. El film es una aproximación contemporánea al mito del hombre lobo que no duda en combinar el cuento de hadas con el cine social en el São Paulo contemporáneo. También tuvo muy buena acogida ‘O animal cordial’, el debut en la dirección de la brasileña Gabriela Amaral.
“Cada vez tienen más importancia en el género las películas hechas por mujeres”, destacó el director del certamen, Angel Sala, tras dar a conocer el palmarés.
El premio Blood Window a la mejor película latinoamericana fue para ‘Madraza’, del argentino Hernan Agular, una comedia negra en la que una mujer se convierte en asesina a sueldo para paliar su situación económica.
Del Toro y Susan Sarandon
Tras cincuenta ediciones, el festival catalán se ha convertido en el más importante del género fantástico en todo el mundo y volvió a batir récords de público con salas llenas a rebosar y entradas agotadas, una muestra, según su director, de que “el fantástico no es un nicho sino el género que más interesa”.
Sitges celebró la efeméride por todo lo alto, con la presencia de grandes nombres como el director mexicano Guillermo del Toro, un habitual del festival desde que en 1993 se proyectó su ópera prima, ‘Cronos’, y que esta vez vino a presentar “La forma del agua”, reciente León de Oro en Venecia.
También pisó la alfombra roja la actriz Susan Sarandon, que recibió un homenaje con la proyección de la mítica película musical “The Rocky Horror Picture Show” (1975).
La actriz, conocida por su militancia social y política, pidió “disculpas” por tener a un presidente como Donald Trump y explicó su proyecto de dirigir algún día cine porno para mejorar “la imagen distorsionada que ofrece esa industria de la mujer”,
Otro de los grandes momentos de la edición fue el homenaje al veterano William Friedkin, de 82 años, mundialmente conocido por “El Exorcista” (1973) pero también por la oscarizada “French Connection” (1971), que marcó un antes y un después en el cine policíaco.
“Para mi ‘El Exorcista’ es una película religiosa sobre el misterio de la fe. No soy católico pero creo en las enseñanzas de Jesucristo. Hice la película como creyente”, aseguró.
Pero incluso las hordas de fans del fantástico que invaden cada año las callejuelas de la localidad costera catalana no pudieron abstraerse de la tensa situación política en Cataluña, sobre todo después de que los niños protagonistas de la serie ‘Stranger Things’, una de las sensaciones del año que está a punto de estrenar segunda temporada, cancelaran a última hora su vista a Sitges alegando la tensión política.
Por su parte el veterano Friedkin prefirió optar por el humor y cuando se oyó un avión sobrevolando el cielo de Sitges interrumpió de golpe su rueda de prensa señalando al cielo y diciendo “¿Ya vienen de Madrid?”, ante la hilaridad del público.
Fuente: AFP
