La cumbre que reunirá mañana en Helsinki a los líderes de Rusia y Estados Unidos ofrece nuevas esperanzas al mundo, pero muchas de las políticas de Vladímir Putin y Donald Trump también despiertan rechazo, como quedó patente hoy en una multitudinaria protesta en la capital finlandesa.
EFE
La cumbre que reunirá mañana en Helsinki a los líderes de Rusia y Estados Unidos ofrece nuevas esperanzas al mundo, pero muchas de las políticas de Vladímir Putin y Donald Trump también despiertan rechazo, como quedó patente hoy en una multitudinaria protesta en la capital finlandesa.
Casi 2.000 personas marcharon por el centro de Helsinki unidos en su condena a las políticas de inmigración de Trump y su voluntad de construir un muro con México, la homofobia impulsada por el Kremlin, la falta de libertades y el encarcelamiento de activistas en Rusia, entre otras muchas denuncias.