La decisión marca la resolución de un caso de espionaje que fue fuente de fricción entre Estados Unidos e Israel durante décadas, y tiene lugar cuando los dos países están enfrentados por el acuerdo nuclear alcanzado con Irán.
En una declaración emitida por sus abogados, Pollard dijo que “espera reunirse con su querida esposa Esther” y agradeció a quienes lo apoyaron en Estados Unidos e Israel.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, recibió con agrado la futura liberación de Pollard y dijo que él ha presentado el tema muchas veces a los líderes estadounidenses.
Las autoridades arrestaron a Pollard en noviembre de 1985, cuando trataba de buscar refugio en la embajada israelí en Washington. Dos años más tarde fue sentenciado a cadena perpetua por entregar maletas con secretos militares a Israel, incluyendo detalles de inteligencia estadounidense, armas y equipo para interferir radares en el Medio Oeste.
Jonathan Pollard, de 60 años, tiene que permanecer en Estados Unidos por cinco años después de su liberación de acuerdo con lo requerido por la Comisión de Libertad Bajo Fianza y sus abogados dicen que ya consiguió trabajo y vivienda en el área de Nueva York.
Sus abogados dicen que el presidente Obama tiene la autoridad para liberar a Pollard antes del 21 de noviembre y podría permitirle mudarse a Israel inmediatamente.
Sin embargo, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Alistair Baskey, dijo el martes que Obama no planea liberar a Pollard anticipadamente.
