Cuando niño era común que nuestros padres nos contaran historias de reyes, príncipes y hadas
Esas historias reseñaban hermosos príncipes que con su sola presencia convertían los más imposibles sueños en realidad, hasta que el hada malvada lo convertía en sapo.
Estos relatos infantiles extraídos de la imaginación se parecen mucho a la vida política del ingeniero Félix Bautista.
Cuando el PLD llegó al poder predicaba unidad, justicia social y los ideales de su fundador, eran la base de sus dirigentes, en ese escenario llegó a ese maravilloso e irreal mundo el príncipe Félix Bautista.
Todas las aspiraciones desde rey hasta un empleo de segunda eran bendecidas por ese príncipe que era adorado por los Leonelistas y Danilistas hasta que apareció la division, ambición, apetencias personales, cambiaron al rey y a Félix Bautista lo convirtieron en un horrible y repugnante sapo.
El hada que con tan solo un beso lo convirtió en sapo lo acusó de corrupción y lavado de activos y pidió que lo llevaran a prisión.
En este cuento de reyes, príncipes hada malvadas, reelección y Quirino, no queremos entrar en detalles sobre la audacia empresarial de Félix Bautista, la cual no ponemos en dudas.
Si se aprovechó o no del poder, si es culpable o inocente, si está políticamente ligado a una facción politica del partido de gobierno, lo cual tampoco dudamos, lo que si deja al descubierto son los intereses que se mueven dentro de esa organización política.
Deja un mal sabor de boca en el pueblo la manera en que la justicia está siendo manipulada por intereses ampliamente políticos.
Ya han logrado convencer de la gran confrontación interna que reina en el PLD.
No es a eso a lo que el Partido de la Liberación Dominicana nos tenía acostumbrados.
Siempre hemos esperado que funcione la institucionalidad en ese gran partido, pero el espectáculo que estan montando no solo da pena sino que los puede llevar a una gran sorpresa.
Si mal manejos se le imputan al ingeniero Félix Bautista, ya nadie los cree por los intereses políticos que aparentemente, están detrás de esas acciones legales.
O la justicia está manipulada o la Fiscalía no es capaz de presentar algo creíble.
Sí queremos apostar a algo; es que veremos el juicio de fondo y de esa manera se alarga el circo.
