Editorial de Teleradio América.
Papillon, República Dominicana y los narcos franceses.
Los servicios de inteligencia de República Dominicana con la cooperación de agencias extranjeras detectó un activo tráfico de drogas desde nuestro país a Francia.
Las investigaciones que tomaron varios meses concluyeron con la detención de más de 30 personas incluyendo varios ciudadanos franceses entre los cuales había dos pilotos.
Como prueba las autoridades dominicanas incautaron un cargamento de drogas valorado en 30 millones de euros y el testimonio demoledor de agentes encubiertos que señalaban con pruebas gráficas y testimoniales que los ciudadanos franceses eran parte de la red de narcos.
La justicia falló, condenó a los implicados en la banda entre ellos los pilotos JEAN Fauret y BRUNO ODOT por tráfico de 700 kilogramos de cocaína, pero también falló permitiéndoles una libertad condicional lo cual era un pasaporte para su huida.
Todo discurría normalmente, hasta que hace varios días nos enteramos que los dos pilotos narcos salieron en forma clandestina de nuestro país cuando grupos de ex militares franceses montaron un rescate sin ningún riesgo ya que muchas personas miraron para otro lado.
No somos una colonia ni la prisión de la cual el gobierno francés del momento enviaba sus reos.
Queremos que el gobierno francés coopere con el nuestro y devuelva a los narco pilotos franceses.
Si alguna similitud hay con Papillon la novela autobiográfica del francés Henri Charrierere y que fue llevada al cine y este escape que nos pone en ridículo como país es que las autoridades francesas han creado una fantasía teatral y van a glorificar los pilotos narcos.
El guión contra nuestra patria continúa de parte de la nación que es la mayor culpable de la tragedia Haitiana.
La isla de los leprosos ahora somos nosotros igual que en la película Papillon, no Haití donde ellos crearon el sistema judicial perfecto, destino el cual, seguramente, aspiraban los pilotos narcos, para purgar su castigo ya que ahí seguramente estuvieran operando actualmente.
Ya estamos viendo el show mediático que están montando en Francia, le cae como anillo al dedo para proteger su ex colonia haitiana.
El gobierno que no se quede callado, que vaya a todos los organismos internacionales con el fardo de pruebas que tiene y exija que estos dos delincuentes vengan a purgar sus penas en cárceles dominicanas.
Este país tiene que ser respetado por Francia.
Los dominicanos no somos ciudadanos de segunda clase y mucho menos la isla de los leprosos como en la película de PAPILLON.
