“Un pedazo de papel, sino hay hombres dispuestos a defenderla”

Hoy 6 de noviembre del año 2015 se conmemora el ciento setenta y un aniversario de la proclamación de la primera Constitución de la República Dominicana en la ciudad de San Cristobal, que fue una consecuencia de la declaración de independencia y separación de Haití, cuyo proceso se inició el 27 de febrero del 1844.

Un aniversario del ¨pedazo de papel¨ que ha sido modificado en 39 ocasiones, en 33 de ellas solo motivada por el tema de la reelección presidencial, lo que demuestra el escaso desarrollo democrático que ha caracterizado nuestra muchas veces azarosa vida republicana,

Fue Federico el Grande Rey de Prusia, quien calificó la Constitución de esta manera cuando dijo: ¨la Constitución de los pueblos no es mas que un pedazo de papel que muchas veces interviene en la relación entre gobernantes y gobernados, pero que sin embargo es imprescindible para la construcción de un Estado organizado¨.

No fue Joaquín Balaguer como algunos han querido atribuirle quien primero calificó a la Constitución como un pedazo de papel, este adjetivo fue usado en múltiples ocasiones para justificar violaciones o cumplimientos de las letras de las constituciones desde la época de los regímenes absolutistas hasta nuestros días.
Ahora, en la República Dominicana ¿para quienes la Constitución ha sido un pedazo de papel?.

Pues una carta constitucional modificada a voluntad de los gobernantes para su provecho personal y deseo de continuidad en el poder, no ha sido mas que eso, un pedazo de papel, que para lo único que sirve es para arreglarla a voluntad de quien tiene el poder político y económico de acomodarla a su voluntad.

Parece mentira, que los gobiernos de los grupos y partidos que se auto-califican como avanzados y liberales, sean los que han irrespetado la voluntad popular expresada en la Constitución Dominicana en toda su historia, y que ademas sean estos políticos, según ellos con vocación democrática, los que hayan provocado la ruptura del orden constitucional por la vía de la corrupción y la compra de voluntades.

La historia dominicana en los últimos cien años está frente a nuestras narices y volvemos a cometer los mismos errores vez tras vez con el endiosamiento de figuras políticas que se auto-califican de imprescindibles.
La modificación mañosa de la Constitución en 1928, dio paso a la continuación del gobierno de Horacio Vasquez, que originó a su vez los 30 años de una férrea dictadura encabezada por Trujillo.

La derogación por medio de las armas de la Constitución del gobierno de Juan Bosch de 1963, provocó un caos que terminó con la división de las fuerzas armadas, una guerra civil, la invasión de nuestro territorio y mas de 3,500 muertos en un corto periodo de tiempo.

                               Joaquin Balaguer

Parece mentira, que la Constitución de mas larga duración en nuestra historia republicana fue de la autoría de Joaquín Balaguer, por 43 años se mantuvo ese documento, de quien fue acusado de gobernar como un déspota ilustrado, y sin embargo dio lecciones de como guardar las formas y cumplir con las normas constitucionales durante sus 22 años de gobierno.

Es en el regimen del perredeísta Hipólito Mejía, cuando se compra literalmente con dinero de un banco quebrado, la voluntad de los legisladores para modificar la Constitución en el año 2002, se montaron sobre la ola de un engañoso resultado electoral que parecía les garantizaba la reelección lo que terminó en un estrepitoso fracaso.
Y es en el gobierno del peledeísta Danilo Medina, cuando vuelve a reformarse la Constitución para abrir las puertas a la repostulación consecutiva del presidente, siempre el mismo tema.

Se montó un golpe de estado institucional en el partido de gobierno, a nadie le debe caber la menor duda de que la institucionalidad del PLD está enterrada en los terrenos del Metro Country Club, pero ademas se montó un mercado persa de compra de conciencias en el Congreso Nacional.
Las consecuencias de estas acciones todavía están por verse en el futuro próximo.

Es decir, hoy día de la Constitución, podemos decir que de todos los hombres que han ocupado el solio presidencial después de la muerte de Trujillo, han sido Joaquín Balaguer y Leonel Fernandez, quienes mantuvieron el respeto por las normas constitucionales y presentaron su nombre a la reelección solo cuando esta no estaba prohibida en la República Dominicana.

El primero, cuando el país pasaba por una situación muy difícil, en medio de la lucha armada en las calles de grupos de izquierda y derecha, continuas conspiraciones militares y enormes presiones de organismos de represión internacionales, por lo menos trató de mantener un equilibrio institucional en un país sin tradición democrática y los resultados demuestran que lo logró.

Y el segundo cuando ante la tentación de modificar la Constitución en el año 1998 para restablecer la reelección para su propio provecho dijo que no, y posteriormente cuando fue tentado de nuevo en el año 2011, aun teniendo los votos suficientes para modificarla y repostularse volvió a decir que no, y dio paso a Danilo Medina, a quien le entregó el poder en el año 2012.

No, no hay nada que celebrar en el año 2015 en este aniversario de la proclamación de la primera Constitución Nacional, mas bien deberíamos llorar porque lo que ocurrió en el Congreso el pasado mes de junio, ya hoy puede juzgarse como una vergüenza nacional de la cual ojalá, no nos tengamos que arrepentir en el corto plazo.
Pero para ser justos, como dijo Juan Pablo Duarte, seria bueno completar la expresión de Joaquín Balaguer cuando declaró en un discurso en 1966 que la Constitución era un pedazo de papel, porque esto ha sido usado de forma perversa por los enemigos políticos de ese gran dominicano.

Dijo Balaguer: ¨La Constitución no es mas que un pedazo de papel siempre que no hayan hombres dispuestos a defenderla. Lo que vale en cada ocasión no son las instituciones sino los hombres¨.

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Agencias De Noticias

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