Por Humberto Salazar
En España donde las encuestas electorales antes del ¨viernes negro¨ post Brexit pronosticaban un resultado electoral muy diferente al que arrojaron las urnas ayer domingo, si se puede decir, que fracasaron estrepitosamente.
Lo esperado era la disminución del Partido Popular, la remontada de Unidos-Podemos al segundo lugar, la caída del PSOE y congelaron a Ciudadanos en un fuerte y decisivo cuarto lugar.
Cuando se contaron los votos aparece un aumento muy importante del apoyo al PP, quien gana en la mayoría de las autonomías españolas, se congela Unidos-Podemos y cae el apoyo tanto para el PSOE como para ciudadanos.
Es mas, cuando se cuentan los apoyos en el Congreso de los Diputados, que es donde se escoge al presidente de gobierno en el sistema parlamentario que rige el Reino de España, lo que vemos es como se cae la cantaleta de gobierno de izquierda o ¨progre¨, que es lo que venimos escuchando desde hace 6 meses.
Probablemente lo que ha salvado por ahora al gobierno del PP y Mariano Rajoy, es lo ocurrido después de la decisión de los ingleses de salir de la Unión Europea a través de un referéndum y el terremoto político y económico que provocó en las ultimas 72 horas.
El mundo esta viviendo las consecuencias políticas de la crisis económica de la primera década de este siglo, que se expresa con el surgir de múltiples grupos populistas y demagogos, de derechas y de izquierda, que plantean desde la acera de la critica feroz un discurso que cobran fácilmente los que soportan el peso de las medidas de ajuste.
Parece increíble, que el viernes lo mas buscado en Google en el Reino Unido era que significaba la Unión Europea y las probables consecuencias del voto que dieron los ingleses a favor de la salida de su país del grupo de los 28, hablamos de un país del primer mundo que una vez fue el dueño los mares y los océanos.
Se les olvidó a los grupos nacionalistas populistas, que el Reino Unido incluye territorios que desean ser independientes, como Escocia e Irlanda del Norte, por lo que ya se están planteando mas referéndums para proceder a la separación de las Islas de la Gran Bretaña.
Lo mismo ocurre en España, si los españoles apoyaran a Unidos-Podemos, y ocurre lo que hasta el día de ayer parecía inevitable, que esa coalición quedara a las puertas de ejercer o ser parte del gobierno, se abriría el cauce para la disgregación en tantos territorios como movimientos nacionalistas existen en ese país comenzando por Catalunya y el País Vasco.
Hablamos de situaciones similares con resultados diferentes, mientras los ingleses votaron por salir de la UE y avivar conflictos históricos nacionales y territoriales que parecían pospuestos, sobretodo después del resultado del referendo de Escocia, al parecer los españoles apostaron por evitar caer en la trampa nacionalista, en un mundo cada vez mas plano y conectado.
No sabemos al final de que piensan vivir los ingleses en los próximos años, cuando entre el 12 al 15% de su economía la representa el sector financiero de la famosa city de Londres, que es el segundo mercado mas importante del mundo y sede de los principales bancos europeos.
La caída mas importante de la historia de la libra esterlina, sobre el 20% el pasado viernes, junto con el arrastre hacia la baja de las acciones bancarias, de las aseguradoras y otras instituciones del área de las finanzas, no es mas que el reflejo del pánico que ha invadido a ese sector de la economía desde el viernes en la madrugada.
Probablemente este fue el mejor acto de campaña para el PP de cara a las elecciones de ayer domingo, ya que ante la expectativa de una crisis, los pueblos reaccionan tratando de defender de alguna manera lo poco o mucho que tienen, y en el caso de España, a pesar de todos los problemas y escándalos, pareciera que el único proyecto que sabe para donde va es el que encabeza Rajoy.
El viernes el indice selectivo de la Bolsa española (IBEX 35) rompió el récord de caída en su solo día, bajó el 12.35%, encabezada, incluso su caída fue mas grande que la que siguió a la quiebra del Lehman-Brothers en el año 2008, que fue el símbolo de las quiebras bancarias que desató la crisis financiera de la cual aun Europa no se recupera.
Es decir, las noticias durante el fin de semana eran tan alarmantes, que los electores españoles, dieron la sorpresa a todas las encuestadoras y aumentaron considerablemente su apoyo al PP, partido que sale fortalecido de unas elecciones que tenía perdidas el pasado viernes y podría extender su periodo a la cabeza del gobierno, si es que realiza las alianzas necesarias para evitar una tercera elección.
Probablemente Unidos-Podemos, que entró como favorita al segundo lugar y a encabezar una coalición tipo ¨progre¨ en España, su marca de fabrica es el uso de ropa deportiva hasta en los actos mas solemnes, se convirtió en la primera víctima electoral del Brexit inglés, después de todo por aquí decimos ¨no es lo mismo llamar al diablo que verlo llegar¨.
Las consecuencias de la ruptura de uno de los paradigmas de la historia contemporánea, la capacidad de las naciones europeas de entenderse entre ellas y construir un proyecto común después de los 70 millones de muertos de la Segunda Guerra Mundial, todavía está por verse, contra lo que muchos pensaron, en España jugó en contra de los extremistas.
Es lo mismo que creemos sucederá con otros movimientos nacionalistas y xenófobos, los que pululan en en viejo continente y hasta en un país tan abierto como los Estados Unidos, cuando el Reino Unido desnude su realidad.
Sin mercado libre de aranceles para 27 países, sin libre transito de trabajadores comunitarios en ambos sentidos y sin un espacio común de presión acompañando a la zona económica mas grande del mundo, ese país es simplemente una Reina de 90 años, un pedazo de piedra en el Atlantico y dos o tres pozos petroleros en el Mar del Norte.
