El tenista español Rafael Nadal dijo, tras ganar su segundo partido del Abierto de Estados Unidos, que la siguiente ronda será “difícil” porque su rival, el ruso Andrey Kuznetsov, es un jugador “agresivo y muy peligroso”.
“El oponente de la siguiente ronda es muy duro. Lo conozco bien, hemos jugado ya este año y es un jugador agresivo y muy peligroso”, señaló Nadal a los periodistas después de batir al italiano Andreas Seppi.
Para el tenista español, una de las claves del próximo partido contra su rival ruso es estar siempre pendiente de “no entrar en el juego” de Kuznetsov, porque es un jugador al que conoce muy bien y que “tira rápido, tira plano y tira largo”.
Sobre sus sensaciones durante el encuentro con el italiano, Nadal aseguró que se sintió “mejor de movilidad que en el primer día” del torneo, tras enfrentarse a un rival más difícil, lo cual, según reconoció, “es algo positivo”.
“Sentir que uno va mejorando (después de la lesión de muñeca) te causa una buena sensación y te da energía para entrenar mañana y salir a jugar con más energía para seguir teniendo opciones de avanzar”, destacó.
Por otro lado, sobre la eliminación del canadiense Milos Raonic en segunda ronda, Nadal afirmó que “probablemente sea algo negativo” para el torneo porque, según afirmó, era el tercer cabeza de serie “y una de las actuales estrellas del circuito”.
“Es verdad que Milos ha sido un competidor durante la presente temporada, sobre todo porque tuve que estar dos meses fuera de la competición por la lesión. Lo siento por Milos. Estás cosas pasan”, subrayó el español.
Cuando le preguntaron con quien espera jugar la final este año, Nadal respondió que no piensa en finales cuando todavía está en tercera ronda, y recordó que lleva tiempo sin llegar al último partido de este torneo.
“Vengo de una lesión, ahora es imposible pensar en una final. Voy día a día y estoy muy contento de volver a estar en competición y que la muñeca esté mejorando, así que en lo que pienso ahora es entrenar bien mañana”, añadió.
Finalmente, Nadal también se refirió al momento histórico que protagonizó este miércoles cuando en la mitad del segundo set se convirtió en el primer tenista en poner en juego la pelota con el nuevo techo retráctil del estadio Arthur Ashe cerrado.
“Ha sido increíble y estoy muy contento, pero la diferencia no ha sido muy grande. Con el techo abierto no hay nada de viento, así que el cambio ni se nota, y está tan alto que no sientes que esté cerrado”, afirmó.
Para el tenista español, es “fantástico” que Nueva York tenga una pista cubierta, algo “buenísimo para el torneo, para los fans, para los jugadores y para el deporte en sí”, pero en su opinión, no se debería cerrar el techo “a la mínima que caigan dos gotas”.
“Si es una lluvia que va a durar solo cinco minutos no se debería cerrar el techo, porque esto es un torneo al aire libre”, insistió Nadal, quien en todo caso reiteró que está encantado de haber sido el primer tenista en jugar con el techo cerrado. EFE
