Si no conoces a ‘Success Kid’, no has entrado nunca en Twitter. El pequeño Sammy Griner es, desde hace años, toda una estrella de las redes, gracias a una sola pero gloriosa foto.
La historia de Sammy Grines se remonta a agosto de 2007. Aquel verano, el niño tenía 11 meses y no podía imaginar que la foto que le iba a hacer su madre, Laney Griner, le iba a convertir en toda una estrella. Estaban en la playa de Florida y su cara de ‘trabajo bien hecho’, le iba a elevar al nivel de mito en Internet.
Su madre compartió la foto en Flickr y Getty, sin imaginar la dimensión que alcanzaría la instantánea.
Entre 2011 y 2012, tuvo su pico de fama. Memes por doquier corrían por redes sociales y sites. Sammy Grines tenía 4 años y seguía sin saber que era una súper estrella. Algo que, 10 años después, ha cambiado. Al igual que lo ha hecho el joven Sammy, que ahora es un guapetón hombrecito.
Y lo sabemos por que su madre, fotógrafa profesional, ha compartido una foto en la quecompara a los dos Sammys: el de 2007 y el actual. Lo ha hecho con la misma camiseta, en la misma playa y con el mismo gesto. Bien jugado. Eso sí, esta vez sin comer arena. Ya es mayor para estos manjares infantiles.
La foto toma mayor relevancia si cabe, puesto que la familia supo aprovechar la fama de Sammy, no para lucrarse, pero sí para salir de una complicada situación. En 2015, el padre de Sammy tuvo un problema en el riñón y el tratamiento era demasiado caro para ellos. Ante tal panorama, decidieron abrir una campaña de crowdfunding para reunir el dinero necesario para el mismo.
En menos de una semana, la familia reunió 88.000 dólares, muy por encima de los 75.000 que necesitaban para tratar a su padre. “Le han devuelto la vida a mi marido y la esperanza de un futuro para Sam. Daros las gracias el resto de mi vida no será suficiente”, respondió la madre, una vez terminado con éxito el tratamiento.
Eso sí, ahí quedó el afán lucrativo de la familia, quien no quiere abusar de la fama de su hijo. De hecho, a pesar de Sammy ha prestado su imagen para alguna campaña de publicidad, la familia habría rechazado numerosas ofertas para acudir a programas de máxima audiencia en televisión. De hecho, ni siquiera tiene perfil en redes sociales.
‘Success Kid’ ha sido, es y será un mito de Internet. Pero Sammy Griner quiere ser un chico normal y anónimo, en la medida de lo posible.
MSN.com
