Requisitos para una campaña electoral exitosa
El afamado consultor político Joe Napolitan, esbozó los 10 mandamientos para una campaña electoral exitosa, que aplican a la perfección para quienes aspiran a escalar los resortes del poder en la República Dominicana. Estos decálogos electorales son los siguientes:
- Tener una estrategia (escrita)
- Definir los objetivos
- Conocer el contexto
- Inventariar recursos
- Desarrollar la propuesta
- Apuntar (targeting)
- Organizarse
- PresupuestarRecordar que. . .
- Los otros también juegan
- ..Estrategia es para ganar
Dejando un onceavo mandamiento no oficial, que reza: “Las tácticas no son para perder.” Partiendo de estas premisas, se vislumbran algunas de las principales fallas de la oposición dominicana ante la maquinaria electoral en la que se ha convertido el PLD con el pasar del tiempo.
Desde la óptica del torneo electoral del 2016, la debacle del PRD y el surgimiento del PRM, esto imposibilitó cumplir con el primer mandamiento, no hubo estrategia producto de la celeridad en la conformación del nuevo partido.
No se definieron los objetivos, lucharon dos guerras al mismo tiempo contra el gobierno y el grupo que permaneció al lado del actual Canciller, lo cual dio cabida a la frase célebre: “El enemigo de mi enemigo es mi amigo.” Con la unificación de los principales antagonistas de la política moderna PLD y PRD Vs PRM; el quinto mandamiento fue el talón de Aquiles del candidato opositor de esos comicios, el desarrollo de las propuestas fue por donde más golpes le acertaron los voceros oficialistas.
La sexta directriz de Napolitan no se pudo llevar a cabo por la falta de conectividad que conlleva una organización política nueva en su primera participación en elecciones y lo pasado en su antiguo partido.
Organizarse fue casi imposible, por todo lo acontecido antes de la conformación del PRM y las diatribas que produjeron las grandes manifestaciones de transfuguismo que plagaron todo el proceso de principio a fin. Olvidaron que el candidato presidente también jugaba y su estrategia era para ganar, no para competir.
Estos mandamientos no son infalibles, pero le dieron resultados positivos, a quien fuese uno de los consejeros de John F. Kennedy y en el país asesoró al equipo de Jacobo Majluta para las elecciones de 1986 y vemos que son bastante certeros respecto a las pifias en que incurrió la oposición en los comicios pasados.
Pero una de las principales fallas y que tiene relación directa con el séptimo mandamiento, es la incapacidad de unificar un frente, lo cual ha dado resultados positivos en el pasado. Una oposición dispersa y desorganizada, no reúne fuerzas ni condiciones para enfrentar a un partido oficialista tan sólido como es el PLD.
Fruto de las derrotas electorales, los partidos políticos están obligados a realizar autoanálisis de los procesos para evitar repetir los errores que acarrearon el fracaso que no debe ser huérfano, porque simplemente nadie asume las correcciones necesarias. El partido oficialista después de celebrar la victoria, reúne sus cuadros para analizar sus yerros durante la lucha electiva y corregirlos antes que lamentar. Eso se logra con direcciones partidarias fuertes.
El verdadero triunfo surge de las cenizas de los peores traspiés, hasta que la oposición no comprenda esto, continuará en el estado de desasosiego que los ha hundido en los peores descalabros electorales desde el 2004 hasta la fecha. Todo esto es posible si hay disposición de corregir los deslices. La venidera convención interna del PRM, trazará si extenderán el derrotero o estarán listos para asumir un compromiso de nación. En política los errores se pagan muy caros.
Creo prudente concluir con la siguiente frase de Napoleón Hill, cito: “La derrota temporal deberá significar una sola cosa, el conocimiento de que hay algo malo con su plan.”
Por; Jesús M. Guerrero
