Artículo Jesús M. Guerrero- 1.5 millones de firmas, militancia política y sociedad

J M Guerrero
J M Guerrero

Inicio con la siguiente frase de Alberto Lleras Camargo, cito; “La esencia misma de la democracia es una transacción, y por eso se refleja fielmente en las asambleas donde la voz de las minorías no se ahogan estérilmente ante la tiranía del poder. Los regímenes absolutos clausuran los parlamentos porque tienen una concepción también absoluta del bien público, que detesta la transacción como un cisma hecho a la exclusiva y excluyente verdad del poder.”

Cada una de las firmas en apoyo a Leonel Fernández, 1.5 millones de rúbricas que han provocado jaquecas y demás convalecencias en sus detractores que lo atacan como si fuese deporte olímpico, su principal dolor es que el 42% pertenece a ciudadanos apartidistas según las declaraciones del coordinador nacional de campaña, Radhamés Jiménez. Es una clara señal de que el precandidato presidencial y presidente del PLD, Leonel Fernández está abriendo el Partido de la Liberación Dominicana a la sociedad y se está constituyendo en la mejor opción electoral con miras al 2020, el hermetismo partidario está quedando en el pasado y adoptando las demandas sociales como su principal sustentación para su eventual candidatura y su visionario proyecto RD2044.

Cito un fragmento del libro 350 años de ideología liberal de Rodrigo Llano Isaza: “La mística se perdió porque los partidos políticos dejaron de interpretar los intereses de la mayoría. Se perdió porque hay gentes que hicieron de la política un negocio y no un servicio al ciudadano. Hoy, tres de cada cuatro colombianos no votan por los partidos, convirtiéndose en un enorme peligro de que llegue un aventurero y desbarate la democracia que tenemos. Porque al elector no se le plantean metas de largo alcance y de largo aliento, porque se cambió la participación democrática por la mecánica electoral.”

Ante la crisis del sistema de partidos políticos en el país, en los últimos procesos electorales los niveles de abstención electoral no han sido altos a diferencia de Colombia en este caso citado del libro mencionado con anterioridad, pero, a futuro pueden elevarse producto de la fatiga democrática que empaña el quehacer político, por esto la implementación de los esfuerzos concentrados, la interacción del precandidato en los 158 municipios del país. Son ejercicios para adecentar nuevamente la política como la ciencia con el objetivo de lograr las transformaciones en beneficios de la sociedad. Porque como afirma el fragmento citado del autor colombiano, el desenlace de la fatiga democrática es el ascenso al poder de un pseudo redentor social, que provocará que los pueblos toquen fondo para luego de transitar un camino tortuoso y sufrir de los peores flagelos, superar sus crisis y eso precisamente es lo que trata de evitar el expresidente Fernández, viendo más allá de curva.

Todos hemos sido testigos actualmente que todo hazmerreir se puede alzar con la candidatura de cualquier “partiducho”, ya sea para lo legislativo o municipal e incluso la presidencial; por el simple hecho de poder vociferar soy candidato. Pero, en un país que adolece de fatiga democrática existe la posibilidad de victoria para estos payasos. Como sucedió en Guatemala con el comediante Jimmy Morales y hoy vemos la desilusión de los guatemaltecos por el fracaso político, aquí tenemos personajes similares.

Los tres aspectos más importantes del discurso del expresidente Fernández, al afirmar que República Dominicana necesita un gobierno que respete la Constitución, es bastante obvio que en su ejercicio del poder predicó esto con el ejemplo. En su primer mandato rehusó modificar la Ley Sustantiva respetando las conquistas del Pacto por la Democracia de 1994, cosa que no respetaría el PRD/PRM y producto de la modificación aupada por el partido blanco en el 2002 y por el ardid que eventualmente fue un tiro que le salió por la culata a Hipólito Mejía; Fernández pudo volver en el 2004 y reelegirse en 2008. Sin embargo, muchos alegan que la Carta Magna del 2010, fue con el único objetivo de perpetuarse en el poder, más equivocados no podrían estar. Esta Constitución ocupa un lugar especial junto a la de 1963 del Profesor Juan Bosch como las más democráticas y liberales.

El respeto a la Carta Magna es necesario para exhibir un país con instituciones fuertes, es la única manera de restringir el ejercicio del poder evitando que se ejerza de forma desmedida, citando al Dr. Juan Miguel Castillo Pantaleón: “Porque el poder que no conoce sus límites, termina socavando su propia legitimidad.” Por esto continua vigente el lapidario Dictum de Acton de Lord Acton, cito: “El poder corrompe y el poder absoluto corrompe absolutamente.”

Otro punto de su discurso fue al momento de resaltar la cantidad de firmas recolectadas por la dirigencia que apoya sus aspiraciones, al resaltar que las 1.5 millones de firmas, triplica la cantidad de ciudadanos inscriptos en el PRM. Es un indicador de lo siguiente; inmediatamente obtenga la candidatura presidencial por el PLD, podrá vencer fácilmente a cualquier candidato que encabece la boleta de la oposición. La gran diferencia entre el partido morado y el PRD/PRM, fue el proceso empleado por el Prof. Bosch al conformar el PLD, no permitió la cuantificación, sin antes cualificar a los aspirantes a ser miembros del PLD. La frase de Joaquín Tamayo lo esboza mejor, cito: “Un partido político sin programa, no es partido ni es nada.” Por esa sencilla razón la oposición política anda manga por hombro.

Estas firmas sustentan el proyecto de Leonel Fernández y demuestran el valor de los dirigentes del PLD. Para entender la dimensión del militante político, es necesario citar nuevamente la obra 350 años de ideología liberal de Rodrigo Llano Isaza, cito: “El militante político hunde sus raíces en los Motines de Subsistencia de las sociedades rurales y se consolida en la Revolución Francesa, donde las capas medias y pobres de la población comienzan a tener una activa participación y, muchas veces, una actuación decisiva en los cambios estructurales de las naciones.” Y el tercer punto fue la defensa de la gestión del Presidente Medina, mientras la oposición solo anhela la división del PLD, sin proponer nada. Los principales líderes del PLD, enarbolan las banderas de la unidad.

Creo prudente concluir con la siguiente frase de Carlos Lozano Y Lozano, cito: “Me refiero al político como un ser cuyo deber es contemplar la sociedad por todas sus facetas, para tratar de mejorarla y de hacer alguna cosa grande.”

 

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