Magowan estaba rodeado por sus familiares cuando murió. Las reacciones dentro de la familia de los Gigantes fueron rápidas e inmediatas.
“La familia de los Gigantes, toda el área de la Bahía y el juego de béisbol perdieron a un hombre cuya pasión y lealtad a su equipo favorito y amada comunidad hicieron posible que todos nosotros y futuras generaciones sigamos disfrutando de la magia de los Gigantes en San Francisco por siempre”, dijo el presidente y principal propietario del equipo, Larry Baer, en un comunicado.
Magowan organizó a un grupo de inversores de San Francisco en 1992 para comprarle al equipo a Bob Lurie luego de que otro grupo basado en Tampa-St. Petersburg alcanzara un acuerdo preliminar para adquirir la franquicia y llevarse el club a Florida.
Bajo el mando de Magowan, los Gigantes firmaron a Barry Bonds y encaminaron la construcción de su actual estadio, hoy conocido como Oracle Park, en el año 2000.
Magowan también contrató a Brian Sabean, el arquitecto de los Gigantes que ganaron la Serie Mundial en 2010, 2012 y 2014.
Además de su esposa, Debby, a Peter le sobreviven cinco hijos y 12 nietos.