EL ESPECTADOR
Se trata de una campaña que lanzó un museo de Bolivia buscando que esta especie en peligro, la “Telmatobius yuracare”, no se extinga. Encontró una hembra después de 10 años.
Entre los perfiles que existen en Match.com, una página para tener citas, había uno que, en definitiva, llamaba la atención. Se trataba de Romeo, una rana acuática de Sehuencas, encontrada hace diez años por biólogos del Museo de Historia Natural Alcide d´Orbigny de Cochabamba, Bolivia, que estaba buscando pareja. Su urgencia era mayor a la de cualquier soltero, pues se trataba de una rana solitaria que necesitaba encontrar una hembra para evitar la extinción de su especie, la “Telmatobius yuracare”.
“En cuanto a quién estoy buscando, no soy exigente. Solo necesito otra Sehuencas como yo. De lo contrario, toda mi existencia tal cual como la conocemos ha terminado (no es gran cosa). Entonces, si estás dispuesto a ayudar a un viejo Romeo a encontrar a su única Julieta, ¡dona para mi causa para que podamos salir y comenzar la búsqueda de mi única y verdadera unión!”, se leía en el perfil.
Hoy las noticias son buenas para este Romeo. Según explica el portal Insider Romeo, finalmente, encontró una hembra de su especie. Escondidas en la profundidad de un bosque en Bolivia un equipo de biólogos encontró cinco ranas de agua Sehuencas: tres machos y dos hembras.
You all know our beloved lonely, @RomeoTheFrog, well we have fantastic news- he’s lonely no more! We have found Juliet. She’s not ready for her blind date yet, but she will be soon. Stay tuned for more as the story of our two love-frogs unfolds! https://t.co/3L1AQGW1Ni pic.twitter.com/Y2hAUFhMj7
— Re:wild (@rewild) January 15, 2019