SANTO DOMINGO. Las Guerreras Volleyball Club apuesta a una segunda ronda de éxitos, luego de una primera sin victorias en ningún partido y solo dos sets en su foja para ser las últimas en la tabla de posición del torneo de Voleibol Superior del Distrito Nacional, liderado por Mirador, Cristo Reyes y Las Caribeñas, empatados en la primera posición con 2-1.
“Tuvimos una mala primera ronda, pero hemos trabajado haciendo los ajustes para ofrecer un mejor torneo en lo adelante”, apuntaron por separado Dante Mañón, gerente general y la capitana, la veterana Priscila Rivera.
El torneo se reinicia este lunes cuando el conjunto Cristo Rey juegue contra las Caribeñas y las Guerreras se enfrenten a Mirador y en una jornada doble que inicia a las 6:15 en el pabellón de voleibol Gioriver Arias del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte.
El torneo recesó desde el pasado domingo para permitir la celebración del Campeonato de Taekwondo, clasificatorio para los Juegos Panamericanos Lima-2019, que serán a finales de julio y principio de agosto.
En iguales términos que el gerente se pronunció Rivera quien afirmó que “hay más acoplamiento, hemos trabajo en corregir las fallas que tuvimos en la primera ronda y vamos más cohesionadas al torneo que reinicia este lunes”.
Reiteró con seguridad que “no hay pánico”, somos un equipo con las herramientas para la victoria y vamos con todo y por todo en busca de la clasificación a las rondas finales”, afirmó Rivera.
Señaló que se ha trabajado en todos los aspectos del juego, reforzando las áreas donde se mostró menos fortaleza en la primera fase, por lo que espera que un mejor espectáculo en los partidos restantes.
Mañón señaló que la gerencia hace los aprestos para poner en la cancha un conjunto competidor y en ese sentido adelantó que se harán las gestiones que sean necesarias para mejorar la ofensiva y defensa del conjunto, en caso de ser necesario, “ya que nuestro principal objetivo es dar un buen espectáculo a nuestros seguidores”.
No entró en detalles sobre la fecha en que estará en uniforme la acomodadora Niverka Marte, quien estaba reforzando fuera del país.
