La cantante Beyoncé ha anunciado con entusiasmo el inicio de una nueva era en su carrera profesional alejada hasta cierto punto de su condición de aclamada estrella del pop: una incursión en el mundo de la moda deportiva que se traduce en su fichaje como flamante “socia creativa” de la firma de moda deportiva Adidas y, en consecuencia, en el relanzamiento de la línea de prendas ‘Ivy Park’ que antes comercializaba por medio de la compañía británica Topshop.
“Este es un acuerdo de colaboración que marcará mi vida. Adidas ha disfrutado de un éxito tremendo cada vez que ha apostado por la innovación y por salir de lo convencional. Compartimos una filosofía de negocio basada en la creatividad, la responsabilidad social y la ambición”, reza un fragmento del comunicado que ha emitido la afamada artista estadounidense.
Con esta alianza, la intérprete pretende no solo intensificar significativamente la proyección internacional de su colección de conjuntos especialmente concebidos para el fitness, sino también “ampliar el rango de productos en base a los estándares de calidad que ofrece un líder de la industria como Adidas”, según se desprende de la misma nota de prensa. Por su parte, la multinacional de origen alemán ha recordado que Beyoncé continuará así con “el camino que labró como una de las primeras mujeres negras en ser dueña exclusiva de una marca de ropa deportiva”.
La ilusionante aventura empresarial en la que se ha embarcado Beyoncé ya ha generado una gran repercusión en las redes sociales después de que la diva, cuyo nombre se une ahora a los de Kanye West y Pharrell Williams en la lista de celebridades que han colaborado con la firma, publicara ayer jueves un llamativo ‘cartel’ amarillo en los que aparecen de forma intermitente las palabras ‘Beyoncé, Adidas y Ivy Park’ en su cuenta de Instagram.
