AP.- La tormenta Dennis azotó Gran Bretaña el domingo con fuertes vientos y descargó tanta lluvia que las autoridades instaron a la gente a protegerse de “inundaciones que ponen en riesgo la vida” en Gales y Escocia.
El servicio meteorológico británico, la Met Office, emitió 250 advertencias por inundaciones en Inglaterra, Escocia y Gales.
El sábado, mientras los vendavales provocaban enormes olas en el Atlántico Norte y el Mar del Norte, se recuperaron los cuerpos de dos hombres en dos tramos distintos de la costa oriental inglesa.
Tredegar, en el sureste de Gales, recibió 105 milímetros (4,1 pulgadas) de lluvia en un periodo de 24 horas, mientras que en el pueblo galés de Aberdaron se registraron vientos con fuerza de huracán de hasta 146 kilómetros (91 millas) por hora.
Cientos de vuelos se cancelaron debido a los fuertes vientos, y las inundaciones causaron interrupciones reiteradas en los servicios ferroviarios. Las complicaciones afectaron a decenas de miles de viajeros en un fin de semana clave para las familias británicas, ya que las escuelas cerraban para las vacaciones de mediados de invierno.
Unos 75 militares y 70 reservistas británicos ayudaron el sábado a poblaciones en la inundada región del Valle de Calder, en West Yorkshire, levantando barreras contra crecidas y reparando defensas contra inundaciones.